Merece ser nombrado. Su segregación es nuestro último talento. No lo habíamos encontrado. Al menos no colectivamente. Como un reto común. ¡Gracias, feminismo!
Ojo, algunas feministas se tomaron a mal que utilizara, forzado o no, el masculino feminismo, en vez de la feminización por cortesía de tantos pinches años teniendo que soportar a los subnormales gilipollas machos alfas blancos ricos de nuestr coto.
El subnormal de la familia. Todas tienen uno. O son como la mía: un vacilón.
En mi familia reina el buen humor. De hace tiempo. La importancia de la risa en el familia nos dejarían claro qué momentos y qué cosas reciben mayor aceptación entre la variabilidad de maneras de pensar respecto a algo en particular. Como la fe de mi abuela en Dios, y su relación con Dios Hija, Jesús. Tío Chus.
Por más que cualquiera de la familia se esmere nunca nadie podrá superar en pios actos del rezo en familia como la hermosísima Yeya, mi tía abuela. Su pelo corto y su itinerancia entre varias casas, entre ellas, la de mis primos Jiménez Cordero. Adrián y Alberto. Tío Chus y tía Ligia. Y Yeya.
Yeya tenía varios niveles de autoridad en la casa de tía Ligia. Y tío Chus tenía el más sabio de los liderazgos: el ejemplo de ser feliz. Aprender juntos a ser personas de bien. La rectitud de un hombre de Puriscal con el arte del que cuida la tierra, cultivándola. Las manos de un campesino toca tierra, y cada paso ejerce un aprendizaje de sabiduría. Mi abuelo Gonzalo, el padre de mi padre, era un tipo pendenciero que sabía amar a más de una mujer y cultivar nueve matas tropicales de las montañas del rincón de los Elizondo, en las laderas de San Juan de Naranjo, puebo al que llegaron los antepasados fundadores del sitio que les pareció más parecido a lo que habían dejado atrás, en el valle de Bautzan, en Elizondo. El pueblo del que salimos.
Mi nombre es Golman Elizondo Pacheco, servidor.
Un un tipo noble tropical.
Entiendo que hay protocolos para que se me reciba acorde con las prácticas del renovado pacto de los procomuneros de las montañas del Carmelo a cada cima de la sociedad abstraida del centro. La muerte de la unicidad de la vanagloria de nuestra centralidad. La hueca Barcelona que murió. Mató a Barcelona. Culpable.
La ciudad está muerta.
Sintámosla, una última vez.
Carajo, se fue José José. Qué triste.
Yo acabo de recibir el espíritu de José José y estoy listo de llevar su historia a una vuelta a España en el que José José, interpretada por su servilleta, se revienta nueve piezas del príncipe de la canción que puede llenar nueve veces el New Chinampa: AQUÏ ES NEWDF!
Quiero algo bien acá para mi espectáculo. La experiencia de Armando Gallo Pacheco. Una noche con el pasado. Lo cagado que era aquella capital que ya no existe. Como hubiéramos perdido lustre. Como si nuestra honda no fuera la neta del planeta, de Planeta, de Los Planetas, de Planet Hollywood, roasting Golman Namlog.
Hi, I’m Golman Namlog.
I am a charachter of the almighty fictional way out. The first positivized feedbackloop.
This sort of concept. That sort of common sense.
Punch the next person who says that bullshit of least sense developed in our failing society «rebuilted» values. The new delivery. Green movies would allow you travel to the very top of Chirripó, like Gabrielito y André, hace nueve días. A nueve días de la proeza la realidad con la que te quedás es lo chiva que es conquistar la ascención máxima de nuestras montañas. Todas sagradas. La naturaleza para un tico se practica antes que la creencia de nuestros padres y nuestro amigos más creyentes. Los que van a misa. Las iglesias están llenas. Y alegres. Hay quien hace red social en misa. Y bellísimas personas de la sociedad se dejan ver y las niñas, y los niños, señoritos algunos, y los típicos patanes insolentes que llevaban sus camisetas con mensajes comunistas cada domingo para tener el mismo debate de los ofendidos ardidos. La enseñanza española.
Un capítulo de la historia que deberán consumir los afiliados infantiles de esta surrealidad a disposición. La última revolución.
Algunos amigos muy ofendidos se salieron de mi facebook por algunas palabras que ellos consideran indignas de nuestra especie de bien. La moral de los nuestros. Los claros oscuros de la moral. La moral distraida de los sacerdotes en su club de Toby. Porque Jesús habría querido. Lo que ellos, en cónclave, debaten. ¿A qué templo imaginan un joven Jesús, quizás esta vez hermana, fúrica, Greta, ante la santa sede en plan poseida por los demonios que la llevaron en extrañas circunstancias que un Uber conducido en New Barcino, con el glamour por los cieles de lo que decimos ser, insolentes, en un momento de despestar al ser que nos dispone en sintonía a un mismo texto que se desvela como una película en el minuto 99 de climax orgásmico. Porque todos queremos llegar. Como saber amar como se refería José José. Con esas contradicciones. Con esos giros de guión. Como esa ciudad y esa cultura que se nos fue. Lo grande de nuestro insolentes y artistas entre el Ajusco, el Tepeyac, las Águilas, Desierto de los Leones, Toluca, Popocatepetl con la Iztaczihuatl: amantes. La ciudad de los dioses que se aman y se esperan. Entre sábanas; húmedas. Oh, Dios. Ohhh, Jesús. Jesús. Jesús. Jesús. Jesús. Jesús. Jesús. Jesús. Jesús. La experiencia traslacional a conversar una vez más con Jesús. Mientras te acompaña para ponerte al día de los rebulosos pensamientos en mi cabeza perturbando mi acceso universal a la gloria de estar presente en el máximo nivel de la consumación de un tiempo liberado de su cadena de oro al sistema capitalista militaroide en el que Dios es el dinero. En las nueves cimas de los nueve miles. Los montañistas entenderán el giro de la imposibilidad de un nivel ligeramente por encima de nuestra epidermis. Con esa concentración de agua dando vueltas en círculos de cada uno de los estados de la materia, salvo el magma de Franklin Chang. ADastra. En la cabeza de Franklin. Ya tenemos la nave lista. Ahora consíganme a Brad Pit para hacer este guión. Y Franklin puso un código en marcha para explicar el proyecto que nos resuelve uno de nuestros nueve retos del hombre espacial en la conquista por el límite del caos. Desde que asumimos que somos un sistema complejo que se lleva bien con la serindipity del capitalismo de masas programadas para el double talk de un doublespeake, like tributre to a number 9 year. At the edge of that transformation at day nine.
A possible encounter of the nine level.
Like a take on Marty, Scorcese, Lucas, the italian american narrative nostalgia and candid family gangster methods. To survie in a gun driven world. Three to nine generations. Take time. It’s your time. And ours. Let’s compensate the road with soft literature from a one source of futbolart material. Pieces, somo liked to see «a» thing. Like if that’s a thing, you know. I don’t know, sometimes I find myself explaining something I believed when I was sixteen. Whatever is supposed to be unlocked. What’s near in our insignificant existance, yet here we are, celebrating time, or just reading this post from a facebook link, or a twitter thing, or a buzz meme, or a Russian driven scam, or a Occuppy movement community manager poking on some old server rules from a debate that took place online only two lifes ago.
I take it you like serial stories. Balzac knew it. So did Marcel Proust. So if I ever want to Truffaut my way into the star system economy of every social market adherent to itself, by what we represent in the fictional resolution of our urban challenges. This are our nine last proposals. And our three best ones are going to kill the Internet. And the New Internet begun.
You take the audience with the oldest trick in the book: the timely Conga Line, la línea de conga, papito. Una mami rica siempre lidera una línea de conga que consigue su objetivo, acarrear a todo el personal. Toda fiesta que se precie debe acabar con una línea de conga. Hasta el momento de quedar en el centro de línea de conga que ayudaste a crear con el infalible liderazgo de una ángel femenina portuguesa en una fiesta de San Juan. La fiesta se construye con la inspiración de los insolentes. Los movimientos de las tribus urbanas hacia la noche plena. La noción de saber conducir la noche hasta su lado b: el día.
Los hay que prefieren el día. Son como el día y la noche; el agua y el aciete; uña y mugre; ronnie y donnie.
Hay chistes que te pasas. Esa es la gracia.
No frenar es mexicano.
Sobre todo en el chupe.
Y en perder el control.
Precipitarse hacia el vacio.
Justo antes de entrar al agua.
Previo al giro de estas abdominales. Ira… toca.
Lo sexual indigena. Imagínatelos cogiendo. De pronto una red de consumidores de películas pornos de cineastas autóctonos del barrio más bravo de la capital, cuña del culto a la santa muerte, con la noción sagrada de que la muerte es tan digna como la vida. No se conviertan en los Zodiacos de un apocalispsis que está lejos de ser un llamado a un final que se desvelará por los males de nuesra ineptitud como especie. No supieron darle una vuelta más. Se vieron encimismados ante el espejo. Y nos quisimos más a nosotros mismos. Nos autocuidamos. Generamos el concepto de autocuidado en el recuerdo de uno de nuestros nuevos pilares neuronales de un sistema último integrado de la sociedad de las mentes que se entrecruzan en los espacio compartidos de la última Internet. Una vez china, otra UE, otra los gringos obsoletos, otra la New América revelation teen award goes to… Greta.
A ver, listo. Greta se vino en barco de vela desde Suecia hasta New York. Como quien toma el camino abajo de la montaña nevada hasta el medio del valle. Desplazamientos espaciales. Cómo conocemos nuestro territorio. Cómo nos vimos montañas. Y los quesos, y el jamocito, y los toros, y los cerdos, las feministas, lo procomuneros, los anarquistas, los españolistos, los putos de la cabra, la madre que los pario, los Tobbys atontaos, los soplapolla records. Los Ticatalanes Enloquecidos. Los amantes de lo dual.
De pronto una erupción. Una catarsis: los dioses los llevamos dentro.
Aquí andamos.
ALLS
The future is here.
Hasve a piece of your past: our future.
Already aall togethere.
La disyuntiva de salir otra vez a conseguir lo que ya obtuvimos en el pasado. Como un recuerdo de la memoria de un español transformado de los ochentas. Este párrafo puede que no necesite de etiquetas. O sí. Y poder escoger que se eligen cuatro o cinco maneras de hacer. De desvelar. Y esa mulviersidad nos llena de posibilidades la existencia multiversada.
El flow es de otro planeta, la neta.
He enconotrado un mejor título a la pieza que nos conecta con nuestra creación del componente nacinoal de un nuevo tiempo, de verdad.
Autopita tergiversada del más allá: Paz.
Las creencias pasadas de Dios Padre, todo POderoso y eterno, creador del cielo y de la iterra, de todo lo visibile y de lo invisible, de o último y de lo ancestral, de la vanguardia de los herederos de las glorias de los toros bravos de lidia para una parte de la sociedad.
Esa historia. Sin más historias. Que todas estas colgantes.
Make Franco Great Again.
ALLS