Jon Sistiaga se mete en tu cabeza. La tele es así. Es como todo.
Yo empiezo con la soberbia, si me lo permiten.
Yo no soy español, español, español.
No soy español, español, español.
La depresión. 7,5% de la discapacidad en España está producida por la depresión. Yo he querido saber que es ser de España. Y me encontrado con esto. 18 años de testimonio.
Esta es mi obra. La máxima infelicidad en la humanidad. El síndrome de la enfermedad emocional. Depresión y ansiedad. De 10% a 30%. Algo está pasando. Las oportunidades que tenemos las convertimos en obligaciones. No es que me gustaría… tengo que ser actor. Superexigencia. Autoexigencia. La gente quiebra. El éxito de estos libros. La necesidad de la psicología. Mis amigos psicologos se ponen las botas. Armando Gallo Pacheco no pudo evitar la necesidad de apropiarse del ride, asumiéndose como esa pseudociencia con la que copias a los verdaderos profesionales. Yo soy profesional. Me dedico a esto. Trabajo así. Este soy yo. Esto es mi CV. ¡Cómeme los huevos, Maldini!
Un tributo a un rapero no suele ser la norma. La gente no toma en serio el rap. Yo cometí ese error. Llegué a asumir el rap como estilo de vida a los 42 años. Y no es coincidencia. Si me lo permiten voy a ser numerologo. Por lo tanto… cómeme los huevos, Maldini.
Pinto es una referencia para Costa Rica. Hay cosas que sólo sabemos los que coexistimos con esta tropicalidad tan hijueputa. Vieras, que risa. Costa Rica se puede asumir una extravagancia más. Claro que sí. Cómeme los huevos, Maldini.
Podría ir haciendo estos párrafos cada vez más pequeños. Acelerar la ficción hasta el «Punch Line». Presenté esa peli a Cannes en mi debut en la Cotte d’Azzure. I can take Monaco. Let me. I’ll get there by boat, driving my own ship. I am a capitan. I can at least pretend to be one. As a kind of Huckson for my mom. It didn’t matter que liked dick. Like my mom. But he pretended to be someone: the greates hetero actor. The macho man. As if that macho quality could not be gay. Imagine to what that means to group of nine insolent gods from the new city: New Barcino. Capital of the multiversic urbanism.
Mi dificultad es amor, económica moral, ganarte la vida sin trabajo, o tener que trabajar en tres cosas. La depresión somos España. España somos la depresión. Es como el huevo y la gallina. Qué tan de hueva son estos baturros. La insolencia máxima nos lleva el humor de los de afuera. Se ríen de nosotos, cojones. Mi segunda película en Cannes. El mismo año. Fui con nueve películas. Sólo existía el título. Que nada tenía que ver con la peli que se presenta. Pero es su título inconexo lo que los maestros compañeros de profesión, los postdirectores, me hacen el tributo más grande al que tendremos acceso: ser bienvenidos a nueva profesión. Sos uno de los nuestros. Es el club de Tobby; están dentro.
El último club de Tobby.
The reality. I came into the concept of . Melancolía, según Axígona. Ahí es donde te arriesgas. Cuando quieres meter una metáfora muy acá. Y te vas a la antigüedad griega con dos grandes riesgos: asumir una banalidad como algo que por newby piensas que es la polla, y no; y el segundo riesgos: estar tocando un punto neurálgico de entenderle o no a un autor clásico que está diciendo la neta del planeta, y leerlo, implica un gesto de un esfuerzo sobrenatural. Tener acceso a un libro de Nietzsche que te transforma. Y empierzas por el primero. Y pronto llegas a asumir la afirmación de los griegos en la factura de una sociedad vinculada con sus dioses. Muchos. Muchas. Pero es su ejemplo el que sirve. Y si todos viviéramos en esa ficción agradecíamos a los guionistas que ponían los textos de las obras que luebo nos explicaron la vida de nuestros dioses, y nuestro pueblo. Entero. El planeta.
En aquél momento algunos supieron que la tierra es redonda. Y mucho más.
¿Qué tanto más? Esa es la ficción que nos permita sobrellevar la existencia. Leyendo libros. Pensar rápido pensando despacio. Cómo captamos la realidad. Qué matices nos hacen pensar que lo que es mi triunfo máximo y mi fracaso más grueso son tan sólo la norma social dual necesaria para obligar a un nuevo pueblo libre. Y darle on al nuevo sistema.
Y el sistema se vuelca.
Estuve en el hospital del mar. Escribí un libro explicando lo que me pasa. Mi trastorno de personalidad. Exponerse que te juzgan de mala manera. Ellos esperaban unas cosas. Mi enfermedad tú no la entiendes. Debemos autocurarnos. Uy, este está loco. Una palabra con miedo de ser usada. El punto en el que te puedes asumir: estoy loco. ¿Qué pasa? Tus estigmas negativos que sudan la polla. Lo pillas, no. No quiero que comas la polla, pero al menos podrías comerme los huevos, Maldini.
Es un tipo de literatura. O quizás sólo este libro. Pereza vital. Me sudais la polla. España. Baño de lágrimas. Vámonos de ronda. Y disi. Yo no me medico. Yo sólo fumo. No necesito nueve pastillas para sostenerme en un estado mental más apto. Vivo así y este es mi legado. Mi proyecto. Mi depresión. Y mi única solución y cura: escribir. Y entonces me convertí en un escritor. Pero no publiqué nada. Sólo escribí. Soy así de retro. No quise entrar a un sector y a un juego en el que creo que tengo cabida y posibilidad. Como un Iniesta a los 9 años. Iniesta y yo jugábamos parecido a los 9 años. Esto tiene un valor. En valor futuro. De 9 a 42.
42.
Sobremedicalizado.
¿Con quién quieren que me ponga?
Mi debate farmacologico. Los efectos secundarios de las pastillas que me tomo. Litio. Temblorique. Como ilustrador eso es un problema. Yo no tengo buen pulso, pero mi pulso flaquea. Las pastillas controlan mi vida. Hay algo por encima que ejerce el poder que tengo de estar en la gloria, si así lo veo, o en el infierno. Fuck Dante. Infierno, como el oceano, bienvenidas.
No todos los párrafos tienen que acabar con el recuerdo de Pinto: ¡Cómeme los huevos, Maldini!
Mis ilustraciones quién las dibuja. Mi depresión no dibuja. Mi ilustración la dibuja Olman. Mi ilustración la dibuja Golman. Mi ilustración la dibuja Armando Gallo Pacheco. Mi ilustración la dibuja Elizondo. Mi ilustración la dibuja Olo. Mi ilustración la dibuja el nou del poble.
Pereza. No me puedo hacer cargo de mi mismo. Creo que pueden cambiar las cosas. La depresión me tiene de baja laboral. Salir fuera de aquí cuesta. No es fácil. Nos dicen que no es imposible. O Jon estuvo malito en su día, y ahora camina por prado de trigo, o quizás tan solo zacate.
¡Zácate a la verga y cómeme los huevos, Maldini!
Las referencias están ahí. Ocultas. Hasta 99. Ser igual a los demás no es suficiente. Es ser menos. Fábrica de envidia. Matar por envidia. No puedo con el éxito de los demás. Nunca fue mi caso. Los sietes pecados capitales te dejan la opción de intentar reafirmarte socialmente frente a tu audiencia. Aquellos que te ven. Por la tele. O la tablet. O el ordenador con la super pantalla. Yo puedo imaginarme otro mundo paralelo más sublime que el que Steve Jobs nos ofreció con su legado. Estoy dispuesto a tomar el sitio opuesto a las mayorías. Asumir la diferencia. Aboradarla como mi destino. Una película documental que se desvela en nueve días seguidos. A partid de ahora. Un día dije. Y simplemente ese día no llegaba. Se retrasaba. Por volver a tener un día más. Tengo que volver, volver, volver.
Yo soy mexicano, se nota. Eso la gente me pregunta. A la gente le gusta intentar saber de dónde es uno. Y no llevan bien fallar. Los latinoamericanos nos preguntamos a la primera que coincidimos en un baño y no nos cagamos la madre. Siempre hay algo que comentar con un extraño. Estar bien con la gente. ¿Cómo llegamos a esto? ¿Qué responsabilidad tenemos con lo que nos acontece a todos? ¿Hay algo más grande de lo que nos explicaron en la escuela? Sí. Lo sabemos. The Internet. And the entire world in motion. And futbolarte. And nuclear medicine. And scientiest. I am a scientist. Only I don’t have my title just yet. But I am close to get it. I’m flying to México in nine days from Tuesday. Today is Sunday. I’m just a young Hitcock with a bigger chace to score a fricking goal while facing face to face with a golie. I once had 99% average.
And you drop it there. It’s art. My value is that. Word.
Microsoft. I can do. Word.
Excel. I exel.
My excels use to be a piece of work. I use to be one of the good ones. My excels made my boss tons of pesos, dollars, colones, ruppies, soles, pounds, yens, francos, pesetas. Pelas. Me la pelas.
Me la pelas en NEWDF. Me la pelas en NEWMAD.
Puedo transformar Madrid y el DF con una sola obra. Esta pieza. El texto. Así sólo. En un post. Por un tributo a la Internet. Como si fuera momento de dar un salto y tomar la Internet como si supiéramos ver nuestra realidad mejor que Pixar. ¡Cómeme los huevos, Maldini!
El gesto más noble es un buen libro. O quizás valga con un buen texto. Una buena edición. El libro en sí: objeto. Está aquí. El texto está ahí. Y los libros se cuentan en línea: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17, 18, 19, 20, 21, 22, 23, 24, 25, 26, 27, 28, 29, 30, 31, 32, 33, 34, 35, 36, 37, 38, 39, 40, 41, 42, 43, 44, 45, 46, 47, 48, 49, 50, 51, 52, 53, 54, 55, 56, 57, 58, 59, 60, 61, 62 ,63, 64, 65, 66, 67, 68, 69, 70, 71, 72, 73, 74, 75, 76, 77, 78, 79, 80, 81, 82, 83, 84, 85, 86, 87, 88, 89, 90, 91, 92, 93, 94, 95, 96, 97, 98, 99.
Podría haber llevado la obra hacia otro sentido que no fuera en numerlógico. Y haber acabado el libro en un ALLS.
Todo acaba en ALLS. Es como un punto y aparte. Salvo que la insolencia marque el siguiente punto después de haber alcanzado ALLS.
A ese sitio ya llegamos. Antes. Alguna vez. Es lo sublime del momento. Lo más alto a lo que vamos a enseñar a nuestros hijes volar. Lo siento, no puedo con el hijos e hijas. Ni hijas e hijos. Menos hijos y hijas. Porque si voy a ser español, español, español. Al menos no ser cateto. Todo se mueve el lunes. En el primer día ya todo explota en las primeras nueve dimensiones.
Man the fuck up. Denzel passes the holly gallo. And you smoke it. What’s the fucking big deal, rookie? This shit is heavy. He hit me with a stonners local weed. And kind of loose it. And you see he’s got you. He’s black mailing your ass as you are with a bid mother fucker capo. He’s got the juice and you are being put on the line. You need to take the test and it’s going to come out possitive. You are going to be out of the job. The first day you get in from the academy. I use to play against Costa Rica Academy. CRA was the nemesis of CDS. Sports wise. We had a great relationship of living in two corners of the same city that we took at night and where we hanged, and you know what: pura vida. So there. ¡Cómeme los huevos, Maldini!
You have to Spanish like James Roadhes, or wharever his name is.
He’s going to appreciate an English speaking expat in New Spain. As if Spain could be renewed.
I believe it is.
Some people, straight up: againt the idea.
Not a day goes by. And they are at the other end of the field. And they are comming to get you. I used to be a nine. I still am. I want this in my team. I can choose with who to play. I need to convice the coach. I need to convice the best player of the team. I need to convice the captain of the team. I need to convice the mascot of the team. I need to convice the fans of the club. I need to convice the rich motherfuckers of the club. I need to convice the social collective with a right to vote. I need to convice the voters. I need to convice the neighbors. I need to convice the asociates. I need to convice the puppet masters. I need to convice the insolents. I need to convice the femenists. I need to convice the crew. I need the convice the compadres. I need to convice the banda. I need to convice the putos. I need the convice the pueblo. I need to convice the stadium. I need to convice the man holding the gun. I need to convice my partner. I need to convice my family. I need to convice my own. I need to convice my nemesis. I need to convice the believers. I need to convice the agnostics. I need to convice the fuckers. I need to convice the deavils. I need to convice the average man. I need to convice the average woman. I need to convice the children. No gender. No genre. I always think those two have a thing for each other. Allow it.
As if we should be giving a chance. A possibility to act upon what’s right. The first day of your duty. And you end up with the devil himself. A crooked cop. Do you really think there are crooked cops in your city? Look around you. Smell the world. The real world. Now taste surrealand. NTS. The new shit. I can get you hooked to a new drug. This shit is that in a system. A new system. A woolf cry with your new partner. You arrive to that point. Your act takes you to the gang car cruising town. And they connect the dots. And make a move. As if the city is not being fed by several operations in the dark side of the moon. And if you start that Pink Floyd album at the exact same time you started reading this post. Then you would be doing one of this two choices: reading again on your own, trying it, that is. Right a way. Or introducing it to someone else. That dual choice allows us to breath. Forever. Until one day. When we die.
ALLS