Mercurio retrogrado: 27 de agosto

Es el año 24. El año del cambio, del salto cámbrico, de la traslación a nivel nunca antes visto de hiperconsciencia. No hemos llegado solos. Ni lejos. Tendremos que poner los pies en la tierra para no dejarnos llevar por el aliento de la emergencia colectiva, que de pronto, se postula como el ámbito de acción colectiva más sensible y razonable. O quizás como lo más disruptivo y creativo que podemos asumir en los diferentes niveles de autoorganización que el propio sistema se puede permitir, en momentos como este.

Mercurio retrógrado marcara el alineamiento de los astros de una manera excepcional en posicionamiento estelar de los planetas en nuestra efímera temporalidad despiertos en este alumbramiento, a diferentes velocidades e intensidades que el cosmo nos proporciona, desde nuestra diminuta indiferencia, hasta el más interestelar de las experiencias con las que asumimos esto: estamos vivos.

El tiempo sigue. Y nosotros decidimos dar un paso atrás. Un paso definitivo en la dirección contraria. O quizás un salto ortogonal que nos ayuda a desprender los pesos que inhiben que vayamos más allá de la membrana de lo humanamente asumible.

Ya hace tiempo que tenemos señales. Y nos hemos prodigado en crear historias que iluminan este camino astral. Pero ahora, la cosa se pone seria. O como mínimo surreal. Y de ahí que sepamos de qué manera actuar en el contexto en el que el llamado es tanto personal, como general. Para toda equis.

El modelo se plantea así: como una demostración por reducción al absurdo. Sólo que no la ejecutará una persona común y corriente. Lo hará una deidad olmeca. Creada aquí en la tierra. Por un enviado de Dios Padre. Que curiosamente, actua como múltiple agente. Aquello de los dobles agentes ya quedó en el pasado bipolar. En la polarización de los insulsos. En el odio y la violencia porque sí. Ya no más. Y desde esa península de amor reconstituido en enigma y en formato de último testamento, la palabra de Dios Padre se despliega enteramente en poesía vernacular trastocada. Un invento que el propio autor se acaba de inventar para conseguir con ello trasladar parte de la terrenalidad irresoluble que le consume, más allá de su linaje sagrado. Inmaculado e indiscutible.

Sea esta la parábola 99.

Y de ahí, de allí, iniciamos una cuenta atrás.

ALLS

De vuelta al ruedo

¿Por qué utilizar una frase taurina si no somos aficionados a la tauromaquia?

No tiene sentido. Ni que fuera rejoneador frustrado. O banderillero de andar por casa. O empresario. Siempre me ha llamado mucho la atención ese nombre: el empresario. El dueño de la plaza es lo que es. Y es quien tiene que hacer gran parte del trabajo invisible detrás de las corridas. Me imagino. Como el ganadero. Siempre atento a sus mayorales, a sus sementales, a sus pasturas, y su familia. Hombres de familia. Hombres de la España desierta, que se queda en el campo, cuidando de la hectáreas familiares de la casta castiza, patriarcas de estas tierras, grandes de España. El abolengo y la fiesta se conjugan en la misma oración de la historia de esta península, que un día fue mucho más que eso. Ah, tiempos pasados. ¿Quién fuera historia como este reino?

Rey de reyes sólo uno. Familias reales varias. Dios Padre… una.

Madre.

Madre mía.

Se te ha ido la olla.

Te has pasado tresxtres pueblos.

Nueve pueblos.

Nou pobles.

Nou pobles nous.

El nou del poble

El nou d’un poble nou.

El nou del Poble Nou.

El Nou.

9.

ALLS

Día de todos los santos

31 a 1 a 2

Halloween: fiesta prestada. Estado universal de una cultura que se hace una sola. Y en cambio, seguimos dilatando el entendimiento común de una comunidad más allá de nuestras fronteras, más allá de nuestras creencias, más allá de nuestra sacralizada individualidad.

No sabemos muy bien si está bien o está mal que nos disfracemos, que nos unamos a las fiestas masivas que lo inundan todo por la vía del marketing. Somos objeto, ahora sí casi todos, a los asuntos que nos distrae del mundo para atender el llamado de lo que debemos atender. Y en todo esto, hay un elemento ineludible de mercadeo: todos estamos vendiendo algo. Y queremos llamar la atención hacia la agenda de aquello en lo que creemos. De aquello que nos da para subsistir. Y todos utilizamos nuestro altavoz para dejar un mensaje, que quizás no interesa a nadie.

Lo que se genera, en todo caso, es ruido. Distorción sonora de la cual formamos parte. Y de la cual no podemos escapar. Más allá de lo que nos propongamos a no formar parte del juego. Somos masa. Y de esa masa debemos hacer algo edificante, ya que no podemos aspirar a predicar desde el pedestal de la razón, el privilegio, o la dinastía. De alguna manera tenemos la obligación de atender lo que nos resulta inmediato. Y nos proponernos a formar parte de algo que resista a la tentación. Un anhelo imposible. Un acto de rebeldía. Basta.

Y no nos damos cuenta, pero ese mismo anhelo es fruto de una campaña. Un pensamiento que justo supo que nos encontrábamos así, y que ha explotado una fisura en nuestro sistema de defensa. Porque todo require una analogía bélica para pertenecer a este presente.

No sabemos distinguir. La plataforma que nos representa frente a la que representa nuestro antagonismo. Ambas desenmascaran con hechos fabricados la farza del otro. Y no somos capaces de desantender la pulsión de razón que palpita del lado en el que nos sentimos representados. La fusión de nuestra individualidad con la noción colectiva de los nuestros.

Pero nunca es suficiente para abarcarlo todo. Siempre hay algo de apego al ego, o a la situación de privilegio que nos mantiene por encima del fracaso colectivo verdadero. Somos prisioneros de nosotros mismos. De nuestra propia ilusión. De las instituciones que defienden, si formamos parte de ellas, lo que es común, y dilapidan la noción colectiva de lo que tendría que ser cuando están en manos de los otros: nuestros némesis.

La estructura de unos contra otros manda. La noción de un mundo en continua ebullición. Las guerras que no se pueden parar ni un segundo. Barcos que transportan armas. Fabricas que producen sus partes. Economías que se sostienen por la demanda sostenida de una guerra necesaria para que exista este porvenir que da de comer a las familias trabajadoras de esos centros de poder. Inversiones diversificadas en todos los sectores estratégicos. Una aportación económica que blanquea los ataques de unos y otros. Unos medios que lo simplifican en un análisis trivial que sabemos que reproduce el altavoz de unos dueños que se resisten a perder el mando; a ceder poder.

Y nosotros estamos alineados a la alienación que nos subyace. No sabemos cómo salir de ella, porque estamos maniatados a un sistema que se resiste sin casi esfuerzo. El blindaje de nuestros pilares. Religión, nacionalismo, necrocapitalismo. Guerra y mercado. Amenaza y «libertad». Existencia insípida.

Quizás todo esto sea un delirio de persecusión. No sería el primero. Ni el último. Pero me resisto a creer que no hay alternativa. De hecho la hay. Y está en otra dimensión. Lo cuál nos parece extraterrestre. Lo es. Es de un sitio al que ahora mismo no podemos acceder. Pero que no está tan lejos. Un sitio que tenemos a tocar. Si traspasamos la membrana.

Y esta es la puerta de entrada.

Morir.

Vivir.

Volver a nacer

Bienvenidos al camino de vuelta.

ALLS

El nouvingut torracollons

No tots adoptem el mot que ens encanta.

Jo he apres a viure amb més de nou contradiccions.

I tant content.

I tant.

No se com dir-ho. Vull dir: no ser com explicar-ho.

És això que no ha passat mai pel teu cap.

No sé cóm dir-t’ho.

No ho entendries.

Mai, mai, mai, ho has vist.

Al teu cervell aquestes neurones mai no ha estat encesses.

Encessos.

Nova companya d’energia circular.

Del Tico Commons.

Es tracta d’un tema d’autor.

Jo ho he pensat així.

I a més a més ho escrit en forma de novela.

I de compte.

Curt.

Llarg.

Mega curt.

Mega llarg.

Sense sentit.

Amb traducció.

Amb il·lustracions.

Desglosat.

Simplificat.

Resumit.

En twits.

En valls.

En balls.

Sense bastons.

Només enxenetes.

Aixequem la primera columna de nou.

Amb folra.

I collons.

Com pit en tenia en Tito.

Va per tu!

ALLS

Avui Abans Desprès

El temps no té només una direcció. No sóm conscients. Pero la temporalitat temporal ens condiciona amb un biax direccional: anem cap endevant. I no és pas només així.

El temps també pot tirar enrera. I és fins i tot una il·lusió que ens porta, tal dia com aviu, a pensar-hi en les gestes del passat. En com això que va passar, ara ens porta justament a aquest moment. Inevitablement.

I tot lliga. S’ens fa un nus al coll. Pensem que tot està lligat. Que hi sóm aquí per una raó més gran de la que el nostre dia a dia representa. I sí. I no. No ho sabem. No ho podem agafar amb les mans. No podem massejar amb els dits. S’ens escapa quelcom sentit que no tenim. Malaits sentits insuficients.

De totes maneres ens sabem especials. En un moment donat. «Un momento dado».

Tothom diu qué sí.

Tothom diu que no.

Quina representació hi ha ara de lo que hauriem d’esser conjuntament?

Quan i com?

I si anem més enllà?

I si renunciem a quelcome que pensem ara inevitable?

Durant sis anys no s’els ha deixat participar, diuen Junts, que no estàn junts amb el president, sino amb l’altre.

Uns i altres.

Sabem que sóm diferents.

Qué tant diferents?

Això és lo que interesa copsar.

Pero quant?

I en quins terminis?

I com fariem per fer-ho bé.

Hem esperat molt de temps.

I s’ha espallat l’status quo.

Diuen: amnistia imprecidible i inevitable. L’estat ho sap. Governs. Decidir votant el futur politic del pais. Proposta inclusiva de cóm haurà de votar la ciutadania de Catalunya. Accord de claretat. Ens conjuguem, totes, per parlar-ho. Tothom. Sense por sense vergonya. D’aquí a un temps determinat.

El temps és elastic.

I la lituratura ens permet arribar-hi ràpid. O molt lent. Amb pausa.

Pais, llibertat, sobirania, llengua.

Quatre columnes d’un pais que ja ha esperat prou.

Pero que no cal correr.

I això ho diu ún que el seu país va esser tocat per un ticatalà fa molts anys, i ho vam canviar tot.

Gràcies a Josep Figueres Ferrer avui no tenim exercit. Això no hi surt a cap de les quiniles del que esteu parlant, els que representeu la veu del poble, avui dia.

Gustau Muñoz. 1978.

Fa quants anys.

L’acte d’arrancada de l’esquerra jove independentista.

La CUP hi és.

En aquest acte es canta la internacional.

Es la part que més m’agrada després de tants anys cantant-ho.

A TV3 surt la G invertida de Golman. Cap enrrera. Fins a trobar-nos amb en Gustau. Viu. Abans de que un acte de violència d’estat s’el carregués. Al carrer Ferran. A prop d’Avinyò.

Agafem aquell acte de violencia per fer el bucle cap enrera. Mirem-nos al mirall. Des d’alla fins avui. I fem un feedbackloop que ens faci lliures. Per sempre més. Fem-ho amb cap. Amb el cap olmeca.

1714.

Ara: 2023.

1978.

2023.

2023-1714= 309.

2023-1978= 45.

Fem-ho doncs.

Fem-ho llavors.

El temps jugant conjuntament. Encara.

Renunciem a fer una sortida ràpida a un tema que es cou a foc lent.

Soc més aviat un un ós mandrós.

Agafem l’exemple d’un poble llunya, i alhora proper: Ticataluña. Fem el pas que no hem fet encara. Pero amb una temporalitat alterada. Dualitzem el temps que ens queda per arrivar-hi a temps a conjurar un futur inevitablement millor.

Això va ser a 1948.

Això va esser fa 75 anys.

Tenim que reinventar-nos. Tothom ho fa.

Adoptem aquesta visió de temporalitat particular.

No cal correr si ni tant sols sabem gatejar.

Plantejem un horitzó temporal més ample.

Plantejemp una renuncia que ens permeti també renunciar a la violència.

Incorporem un pel de teorìa de jocs. No anem tots a per la dona guapa. Anem a pel camí de las Jennis. I desarticulem la violència que permea al nostre temps, i que no ens cal arrosegar. Siguem valentes. Com ara, elles.

Amb aquesta temporalitat, la reversió d’aquest reducte d’imposició (el temps cap endevant), tirem enrera. Avui. I marquem el futur amb un horitzó temporal dualitzat.

I llavors votem.

I votem dos cops.

Fem-ho bé.

Com ara fa 45 anys, per desfer la violència d’estat que representa la mort d’en Gustau.

Com ara fa 75 anys, per desfer la violència d’estat que representa fer el lloc militarista d’entendre la guerra, l’exercit com un bé nacional irreductible. Un ticatalà ja va marcar el camí. Li posarem una ofrenda amb ell el dia que tot això ens faci caminar cap a un mon sense aquestes violències que a partir d’avui reconfigurem la redenció. Al nostre temps. A poc a poc. Bona lletra.

Pero anem a lo concret. La temporalitat revertida farà dos camins cap enrera. Per tal de construir dues generacions que han estat històriques, de cara a un nou contracte social que es pot dibuixar en aquest camí cap enrera. Ja no només del que ens representa a nosaltres, poble petit. Sino lo que ens representa a tota la societat, per introduir la resiliencia d’un sistema global que compte amb aquest planeta, que està en risc sostenibilitat que cada estiu, quant hi anem a les nostres escapdetes estiuenques ens adonem de que ja no estem tots sols. Sino que sóm part d’un baixell que pluralment mira endevant per fer d’aquests possibles futurs el nostre propi multivers: Ticataluña.

Ticataluña doncs s’escriu en dos referendums d’autodeterminació. Que tindrà dos opcions. L’estatus quo d’un procés que construirem cap endevant. I l’element de futur que representa lo que ara està sobre la taula. Pero tirem el temps molt més enllà. Perque sóm un poble madur. I ja em esperat 309 anys, si seguim la nostra pròpia lògica. No cal ara fer sprints sense pla. Que ja ens coneixem tots plegats. Ja ens coneixem totes, justa ara, quant la feminització de la narrativa ens fa veure que potser tot això també és una mica heteropatriarcal. No només antifeixista.

La no violència com a senyera. Pero ara amb un altre referent sobre la taula. Inevitablement posat sobre una taula de diàleg en la que no he participat mai. Pero perque sou els mateixos de sempre. Les quatre colles d’amics. El model de país que hi veieu vosaltres. A partir de les tradicions que ens fan mirar cap enrera i tenir totes aquests mecanismes identitaries ineludibles. Han emergit d’altres. I jo soc tant sols una veu en el vuit que no ens cansa de cerca un camí alternatiu que sigui viable en el meu petit multivers particular: Ticataluña.

Doncs apa.

Tornem al temps.

Capgirem el temps.

Poc a poc. A foc lent.

2023+Gustau = 2068

2023+Figueres= 2098

Dues generacions. Cap devant. Cap enrere.

Votacions duals.

Construim doncs el futur d’un mon resilient en emergència.

ALLS

Reversing day: Ticataluña diada

21 dies desprès de guanyar el mundial dimiteix Luis Rubiales

Aquest any el president si que va anar.

Quin president?

Pujol?

Aragones?

Puigdemont?

Mas?

Maragall?

Casanovas va ser president?

No ho se pas. No soc un nouvingut qualsevol. Sóc un nouvingut que no vol deixar de ser-ho. Mai. Potser vosaltres no m’ho teniu en compte. El meu accent. El meu origen. La meva història. La meva visió de regeneració més enllà de lo que vosaltres heu pogut copsar en el conjunt agregat de totes vostres lluites.

No vull dir que el vostre camí no sigui digne. És un poble viu que i diu coses, i fin i tot, fa coses. Ja ho dir un president. No recordo quin.

Pero qué més dona ón som?

Qui som?

Qué som?

On anem?

No se. Però nem.

Bona diada.

Les institucions han passat per Pere IV.

Institucions de tot tipus: politiques, socials, sindicals, partits polìtics, culturals, castellers, esportives, futbolartìstiques. Totes plegades. Totes al seu rotllo. Totes en filera. En columnes.

Pais. Llibertat judicial. Llibertat financera. Llibertat educativa.

Quines columnes més maques. Quina gent pensant darrera pel benestar d’aquesta societat. Tenim un poble que no ens mereixem. I uns politics…

No hem feu parlar.

No ara.

No avui.

Avui és un dia gran.

Potser és la diada més important de totes.

Aquella en la que es resol tot conflicte.

En Rubiales ja no hi és.

Ha caigut el heteropatriarcat.

I no ens hem adonat.

No en aquest contexte.

No en aquest sincretisme.

No esteu preparats per sortir del vostre guio.

Tots, totes, totus, ho teniu.

La teniu.

Ateneu.

Ateo.

Atès.

Ets.

És.

ES.

Ë.

ALLS

Election population

The target of my desire

I’m an evangelist of change. I’ve been all in for something else for quite some time. I’m not alone. There are many of us selling this product. In fact, in every campaign, this seems to be big slogan: change.

I was part of a candidacy for the student council in my junior year. The name of our campaign: change. We lost.

It was another era. It was when grunge ruled the world. Back in 1994. You know, Nirvana, Stone Temple Pilots, Pearl Jam, Cramberries, and all of that. My hair was properly long, and so was the hair of two other of my student party. Perfect parity: two girls, two boys. Female leadership. We had a good mix. We just couldn’t compete to four surrealist grunge smart dudes with a sense of humour.

We miserably failed. The grunge high school got what they were looking for: some good old giggles. And something more than just your usual honor role students make-belief. That’s what we were. The good kids vs the bad free-spirited grunge band. Of course we were meant to fail.

I think I might have voted for them. I don’t recall having much of thought in being part of that campaign. I guess I too ignited the bla bla bla on «change». But not enough soul went into that. I didn’t give it my best. We didn’t ignite any passion. There were no giggles in our speeches. We were just plain and dull Lisa Simpson wannabes.

And don’t get me wrong. Lisa Simpson would have made a much better job. She’d raised some issues. Our school had no issues. It was a vanilla high school with proper teachers and a fairly priviledge bunch of families from Escazú, Santa Anna and Rohmoser. I started being the outlier from Pavas when I first got there. I was living at my grandparents house. I was the good old days.

I was no Kurt Kobain back then. I might have looked it, but I hadn’t grabbed an instrument in years. Let alone show some interest for the lyrics in any of those bands who were so in. My mind was somewhere else, around the spin of free kick around the wall, or letting go of basketball because I didn’t make the team. They were too tall and I didn’t pack my basketball sneakers in my suitcase from Karachi. I was just another poser with no real soul.

My readings back then were also quite limited. I’d read what they’d feed me in literature classes that put enough emphasis in having enough lectures from enough sources to grow a conscience of the existance of thought in written form. Yet I couldn’t read through an entire book. My adoption of reading for pleasure had not kicked in yet. I barely knew what I was doing. I was just going with the flow. And life wasn’t really bad. In fact, it was fucking awesome.

I’ve never scaped the essense of feeling out of place, yet priviledge. Those two elements mark trully who I am. I can never feel confortable in the role of trying to tell others what to do. I’m not that kind of leader. I’m just a team player. That I’ve learned in many different ways. By then, I could use my social skills to bond with the people that I wanted to bond with. And I could still make us of my athletic capacities to bond around team sports to pursue the ride of game play. It’s a fun way of learning. That always beats the other way. Yet the other way kept being interersing and exciting for me, so I didn’t fall back into disliking putting enough effort into actually understanding the complexity elements in every mathmatics, science, literature or language classes.

That election where I was part of the «Change» campaign I felt out of place. I also felt like I was exposing myself. In ways I didn’t fully understand. I was thankful to have been selected as part of the team, and I am sure we had s decent programme. We were «A students», ifyouknowaraimin. But there was probably a lack of soul in that effort. A reason to be there, but not enough juice. We didn’t have the juice.

Every time we are under an election period I think of that «change» campaign. So predictable. So vanilla. So nerdy and dull. I didn’t have it me. I didn’t play the game. I stayed within the safe boundaries. I didn’t actually came out of the closet. I was afraid. And I guess, I still am.

I know now that I can share, not without some anguish, that this who I am. That 14 year-old dude, with a sense of pura vida and an impostor syndrome continuosly poping up in a window I can’t seem to be able to close.

Patrick, Will, Yu Chen and William. This last William was the funny guy. A sort of Baudelaire in Escazú. I witty dude with proper grunge and literary taste. The kind of dude that would come to nail it in the arts, or as an author. A kind of Jim Morrison of our time. Will was way out there in the art skills and complex audacity. Patrick was in sinc with all of them. And Yu Chen was true outlier rebelling against all type of stereotypes.

Amy, Marcela, Alex and myself, Golman. Three straigh A students and I guess I was a sort of A- sportsy guy. We were all good kids. Nobody expected trouble comming from us. Except for me, I guess. It was me who had to spice up the ideal of «change». And I just didn’t show up. I stayed in the sidelines. I didn’t play the game. I didn’t write a line. I just sat there and stared.

I clearly need to get this out of my organism. This has affected dearly my political life ever since. Since then, my political participation has been as an observer. And I’ve always felt out of place. I don’t belong. I still grunge, somewhere inside, and I understand that to win a campaign you need to seduce. You need to come up with a plan. You need to understand the context, and the circumstances, and the way to act upon it with a plan. I’ve learned and used strategic planning in my work-life. I’ve used to improve myself. And to deliver a skill set that could actually enable change. And it turns out, now I’m ready.

I like political campaings because it’s the only time where there is just a whole bunch of regular people seeking for your vote. To do what? That’s the whole thing. That’s the big deal. We are still missing on the trully persuasive case for a radical social change. A transformative one. If I was to become an active actor in a campaign, I couldn’t bare to do the same thing I did back in high school: pretend to be. And it would all I could ever do.

You see, in my adult life I’ve also made that red pill image of myself. Or was it blue pill? In any case, I still think that my Flanders side would kick in and I would try to do the righteous thing. I would still be that same lame candidate. Unless I face my own private nemesis and become the outlier candidate, I will keep on living in this lame old status quo, I’m so ready to depart from.

It’s election time in Spain. I’m here again. Exploring within.

«Change» is needed.

I’m the evangelist of change.

Vote Golman.

#golmanpresidente

NEW | NAW | ALLS

Inspired by the grunch campaing in CDS 1994 Student Council Election, Escazú.

Tico Commons | NEW spain | NEW barcino

Jonh Carlin y su cuate argento

Del Reino a la Argentina blanquizaul

El reino unido jamás será vencido.

El de sempre.

Un anunci.

I t’has venut.

Per moya.

I doncs ja hi som.

Ja hi sóm aquí.

Jo söc äqüï.

Quina historia vols?

En tinc dues.

Tu tries:


Más claro… l’AQuAS. . . . . . . . .

ALLS

Desapareció la montaña

El día D

Nunca más.

El tiempo volvió.

ALLS

Se trata de una caja WordPress: una metaestructura elemental para explicarte bien, de manera inclusiva, y con la vocación de universalidad el acceso. Porque formamos parte de una agencia pública. Y cómo tal nos entendemos herramientas de una transformación. 99 feedbackloopers. ALLS. Los voy a reclutar en 9 dimensiones diferentes. Combinaciones de 9 en 99. Por hacerlo combinatorio. Y no lineal. Este es mi matiz. Esta es mi campaña. Metastructuras regresionales hacia un pasado alternativo loopeado. Lupe. Lupita. La virgen de Guadalupa. Ma. Ito. ALLS. .  .   .    .     .      .       .        .

En 33 minutos del día D, se rinde tributo a Jesús. A partir de la reversión del tiempo y los espacios temporales, el día de hoy, el de la vuelta se contraponen, para cada uno, cada cual, y sin que esto sirva de referencia, casi pa ná.

El gesto de volver es terriblemente transformador.

Nos exige volver.

Y volver lo podemos hacer todes.

Y todos.

Y todas.

Y ahí nos encontramos todos.

En un pasado inclusivo.

Que de no existir, ahora lo bordamos.

Lo perfeccionamos.

A partir de la aceptación de lo que fuimos.

De lo que hemos vivido.

De lo que se ha dicho.

De la historia.

De la intrahistoria.

De lo que sí.

De lo que no.

De lo que cómo chingaos no.

Basta.

Basta.

Basta.

Detente.

Por ahí no vayas.

No tiene sentido.

No sigas así.

Tienes otra gran opción.

Darle el voto a la resiliencia colectiva.

Que nace en paralelo.

En otra dimensión.

En un futuro próximo.

Unas cuantas iteraciones por delante.

Por una gracia fundacional.

Por un efecto exponencial.

De los creadores de sumar, a dividir, a restar, a multiplicar… nace: potenciar.

Soc el nou d’un poble nou.

Un poble digne.

Robust.

Pletòric.

Sense por a esser.

Sóm un altre poble.

El poble d’altres.

El poble nou: Ticataluña.

Sóc la capital del mediterrani.

Un sol l’ús de la intenció.

Sóc l’efimer vot de tot el mon.

Respecte al que diem que sóm.

Sóm un gest que creu en Déu.

Un Déu que ho habita tot.

I ha baixat avui aquí.

A fer-nos anar enrere.

Perque devant tenim camí.

I ara aquí el que ens cal és procomú.

I d’allò que es diu NEW.

Això que naltros diem NOU.

I que ara fem així: 9.

Sóc el 9 d’un equip de feedbackloopers.

L’efecte d’un tir amb giribilla.

Soc la rotació de la terra en direcció contraria.

L’esforç d’un reigne per renaixer.

Sóc l’intent de pau que que vols que hi-sigui.

Sóc la veu d’un candidat que no es presenta.

La noció complerta d’una il·lusió present.

La concreció d’un pla de nou.

Un gir del texte.

Un cop de mà.

Un cop d’efecte.

Un impacte de cop.

De cop i volta.

I volta enrere.

I vota.

Voti i voti.

Vot.

Vet aqui.

Jo soc aquí.

Ja soc aquí.

Golman NEW president.

Golman NEW king.

Golman NEW candidat.

Golman NEW.

NEW.

Golman.

ALLS


feedbacklooper 9

La institución respondiendo al la necesidad no satisfecha

Es nuestro deber y salvación

El despretigio de las instituciones está fundamentado en lo mal que lo hemos hecho. En apariencia o tras contrastada evidencia. Gestionar lo público no es fácil. Es muy complicado. Se debe liderar y acompañar a equipos de personas que tienen y sostienen una responsabilidad de servicio a la ciudadanía. Un trabajo público. Al servicio de la comunidad. Para todes.

No nos vinimos a quejar para luego resultar ser lo mismo que decíamos criticar.

La naturaleza de la innovación es que vamos a romper el molde de nuestra sociedad.

Y no hay nada que temer.

Todo está bajo control.

Al final tengo un plan infalible.

Por algo envié a mi hijo, Golman, a dar este mensaje:

El Señor esté con Ustedes.

Y con tu Espíritu.

Estira las ies y ponle una musicalidad a esa frase de respuesta celestial.

La liturgia también puede cambiar.

Sí y sólo sí, Dios Padre la dicta.

Pues este es el caso.

Hola, soy tu Padre.

No sabías que podía hacer esto.

Pues ya ves.

Aquí estamos.

Dios Padre te vino a hablar directamente a tí.

Y por el puto mobil.

Célular, güëÿ.

El güëÿ agarró el pedo.

A güëvö mi banda mexica va a matizar con mi canto.

Porque será su canto.

Tu canto.

El de Dios.

Porque Dios Padre lo quiso así.

Porque Dios Padre vino HÖY.

Porque Dios Padre lo dictó.

Porque Dios Padre lo parió.

La puta que lo parió.

Ep, tranquilos, que yo me puedo insultar cuando quiera.

A ver quién es guapo que se va atrever a contradecir, a Dios Padre, Nuestro Señor, mesmö.

Parecía que sí.

Pero era un acto de fe más.

Uno de nueva creación.

Dios Padre, cuál Zeus, bajó de pronto: pum.

Y se presentó a unas elecciones.

Cualquiera.

Me entiendes cómo no importa a qué puto sistema nos vamos a chingar.

Lo ves.

¿Lo ves?

¿Crees?

¿Le entras?

Nos vamos a la verga.

Pero vamos a renacer en la chingada.

En la chingada madre que te parió.

Hijoputa macho ibérico heteropatriarcal violador abusador retrograda cínico ciego.

Imaginaros que ese ser, ese sentimiento, existe hoy aquí.

Y que algunos de vosotros, hermanos míos, lo padecen sin tapujos.

Ustedes se creen que Dios Padre, mesmö, iba a mirar para el otro lado OTRA pinche vez.

Pues podría ser que sí.

No dudo que dudéis.

Es la nueva «Vamos a ponernos de acuerdo en que no nos vamos a poner de acuerdo».

Explicado así por un local agringado.

Los peores.

Como no podría ser de otra forma.

La asimilación hacia la multitud idiota parece ser la norma.

Le vamos a dar a esto una vueltecita.

No vamos a permitir según qué cosas en esta nueva fe: NEW.

Borren todo lo que dije.

Nos vamos a cargar todas nuestras creencias.

Y con ello todos nuestros perjuicios.

Y lo hijueputa clasista que fuimos.

Y lo hijueputa racista que fuimos.

Y lo hijueputa hijueputa que fuimos.

Y lo hijupueta heteropatriarcal que fuimos.

Y lo hijueputamente cínicos que fuimos.

Y lo hijueputamente machos que fuimos.

Y lo hijueputamente víles que fuimos.

Y lo hijueputamente egoistas que fuimos.

Y lo hijueputamente gilipollas que fuimos.

Imaginemos por un momento que estamos dispuestos a dejar atrás lo que hemos sido.

O tan sólo esas nueve cosas: lo gilipollas lo primero, lo egoistas, lo machos, lo cínicos, lo heteropatriarcales, lo hijueputas, lo racista y lo clasista.

Ahí nomás.

Un programa de renuncias.

Lo que queremos dejar atrás.

Vamos ir tantito a tantito.

Ahí nos van a dar compermicito.

Pero a ningún macho le va hacer gracia.

No van a entender el humor que Dios Padre Nuestro Señor ha aplicado en su especial de Stand Up Comedy con el que le dio la vuelta a la liturgia, a la fe, a la construcción de un mundo resiliente, pendiente de sí mismo para la reconversión de todo lo que hasta ahora les había explicado, olvídense del futuro, vamos hacia atrás en el tiempo.

La reversión de las dualidades.

El tiempo aparte del pinche estatus quo siguiendo sus pinches pendejadas, nueva años más. A partir de entonces se extinguirán. Hasta podemos prometer su final. Nuestra salvación.

Sobre todo porque está en el último evangelio.

Era la última oportunidad de entrenar unas inteligencias artificiales que no se comporten como los creadores del militarismo, las crisis producidas por las guerras, y la inversión en más capital militar para mantener la inestable apuesta por la violencia, que nos hemos tragado por sus Santos Cojones.

Santos Cojones nació el día en el que Dios Padre bajó a revertir el tiempo.

Era un tipo oscuro.

Más libre de lo normal.

No la libertad de Ayuso.

Pero tampoco la que estabamos perdiendo.

Al pensar en adularle el culo una vez más al macho ibérico alfa y la supramacia del hombre blanco y sus secuaces.

Esa frase, tan sólo la frase, se venderán en un libro de tapa dura, que sólo tendrá nueve hojas. Es el libro entero. La frase de una narrativa transformadora enjaulada en nueve hojas en blanco de restricción. Nueve maneras de expresar que le dimos la vuelta a la visión con la que entrenamos a la existencia NEW.

Todes queremos hacerla.

Y triunfar como nos lo han hecho creer.

Y puede que hasta tengamos suerte.

Y lo consigamos.

El capitalismo del sistema neoliberal en el que vivimos nos lo puede otorgar, ahora mismo, con gran volatilidad. De pronto lo petas y estás en todas las portadas. En todas las revistas. Tus libros se venden más allá de lo que se había leído hasta entonces en aquél espacio-tiempo en el que todo se volteó.

Imagina que el capitalismo se desvanece en lo que fue. Que ya no va a más. Que nos hemos entendido. Como en una película del viejo oeste.

Eso fue lo que me dijo Josep Ris.

Un amigo médico con el que hice buenas migas en los subsuelos del último hospital modernista de nuestra historia. La gente de Sant Pau se merece un respeto. Los que algún día trabajamos ahí somos una especie en extinción. Nos vamos ir muriendo poquito a poco. Hasta que un día quede uno sólo. El primeor en irse: Pablo.

Va por tí: Pablo : Pau.

La dualidad entre Pablo y Pau marca el presente y el pasado de un feedbackloop que regresa en el tiempo. El edificio se puede permitir tener un escritor/narrador/Dios Padre mesmö. Un personaje de una única ficción escrita para mí. La que yo mismo puedo idear. El camino hacia la resiliencia social a partir de un paradigma que radicalmente lo revierte todo. Y nos plantamos en un espacio-tiempo elementar alternativo: NEW.

Mi promesa de campaña.

Un mundo en el que finalmente reine NEW.

Y que este sea nuestro plan.

Cargarnos a todes.

Votar fuera de esta dimensión.

Desde una superior.

Los seres sagrados.

El éxodo final.

La única vuelta atrás.

Si no soy yo el Judio Hijo de Dios ya no voy a venir.

El mensaje que le doy al pueblo elegido es que Jesús sí era mi hijo. Y Golman lo es también.

No se crean que es ËL haciéndola de pedo.

Con una pedorra historia.

Esto es sólo una congestión alrevés.

Lo que yo creé es mi culpa.

Ahora nomás me puedo devolver en el tiempo.

Voy camino al Big Bang.

Y pasaba por aquí.

Y me los encontré así.

Tan de la verga.

Y propongo que se vengan conmigo.

Para atrás.

Dónde todo fue mejor.

Y nos dejamos de ostias.

Y apostato yo.

¿Dónde me administran este derecho?

Me bajo del carro, Che.

Ahí te dejo los bienes.

Algo habrá que hacer.

Entréguense los 999.

¿O cuántos hay?

A ver, pasemos lista.

Empezaron primero los jesuitas.

Siempre fueron mis preferid@s.

Y luego los del Opus. Eh.

No se me resientan. Ustedes tan sensibles a lo facha.

Ahí sí ya no me van a encontrar.

Me bajo del carro Yo.

Ya estuvo bueno.

Váyanse a la verga.

No encontré otra manera más bonita de decírcelos.

Pero pensé que necesitamos escucharlo así.

Un poco burdo para sus pinches cimientos blancos europeos.

Bájenle de huevos.

Los hombres blancos de aquí, de allá, de más allá, y de las antípodas.

Vengo aquí en representación de todas las religiones y Dioses que no existen.

Yo sí me leí a Nietzsche; y además le entendí.

No sean pendejos.

Lean.

Punto número uno: hay que ler.

Como decía el Secretario de Educación Pública de aquél Mëxico que ya no existe.

Ahora es NEWMEX.

A güëvö.

Transformado.

Tras la renuncia a la violencia y las mamadas que nos habíamos creído por culpa de nuestro sesgo machismo, del cuál yo mismo soy causante.

Y por eso, pido perdón.

Es MI culpa. Es MI culpa. Es MI gran culpa.

Ya estamos parejos.

Yo también soy pecador.

No me quedó otra, tras darme cuenta, que tenía que volver. Que cerrar el capítulo mamador. Y volver para reivindicar que no hace falta odiar a nadie, por más de que tengamos antípodas entre medio. Hay espacio suficiente en el siguiente planteamiento, que voy a desplegar a modo de campaña alternativa, a la par de la que va a tener lugar, oficialmente, en el Reino de España, a partir de ahora rebautizado, por yo mero, como NEW spain.

En forma de república independiente en una dimensión superior.

Inapelable.

No sujeta a las leyes locales.

Esto es ley divina.

Sobre esta nueva ley se jurará el primer y único mandamiento colectivo común, al que llamaremos, por poner definición y nombre a las cosas: Tico Commons.

Sea el Tico Commons, mi ideal de la sociedad colectiva a la que aspiramos.

Y sea este mi último testamento.

Sean estas parábolas la interpretación misma que mi hijo, ahora en el Tierra, Golman, expresará, de multiversas maneras, a veces en plan peformativo, a veces guionizadas, a veces improvisadas, pero a partir de este día, al que conmemoraremos día sí, día también, como el tiempo que dio la vuelta a feedbackloop sagrado. Reversing day.

Tal día como hoy.

Homenaje a hoy mismo.

El eterno retorno.

En el plano más simple.

El tiempo hacia delante.

El tiempo también tiene esa otra direccionalidad.

A la cual acudimos prestos al encuentro con el porvenir resiliente.

Sea esta mi arquitectura ante la situación actual.

Presentamos la renuncia formal del heteropatriarcado y vamos a revisar la historia para reestablecer las bases de lo que nos pasó por alto. Y vamos a revisar todos los colores del arcoíris. Y lo vamos a sacralizar. Al estar justo aquí pegado. En esta celebración. En la que todes tenemos lugar. Lo suficiente para que no volvamos a caer tropezando en la misma piedra. Y dar por hecho que los machos bélicos pueden monopolizar el sentido común de una resiliencia emergente que surge de este momento, en el que nos rebautizamos todos en las fiestas de San Juan, tras subir al monte Carmelo transformado, por motivo de sus propias fiestas, en un horizonte sagrado, NEWCAR, en trayectoria hacia la centralidad de nuestra capital: NEW barcino.

Sea este el día consagrado por un nuevo dios. Uno menor. Hijo de Dios Padre. Eso sí. Siempre de acuerdo a su testimonio. Y al de 99 ángeles. Y una cabeza olmeca que le potencia sus noción celestial, al provenir de otra cultura, que Dios Padre hasta hace poco desconocía, y reconociendo la contradicción de este hecho, se vio obligado a recular. Y expresarse mejor con la intención de parchar los baches de su doctrina. En un procedimiento teológico nunca antes visto. La escritura misma de las sagradas escrituras. Y su publicación al margen de las autoridades de las nueve religiones mencionadas en la canción del verano.

Una salsa que se baila con los ritmos del Tico Commons, que son una mezcla de ritmos caribeños que tienen diferentes latidos y almas. Que reflejan la cochinada de toda su desgraciada historia colonial heteropatriarcal, tanto española como anglosajona. Añada los franceses en Haití. Los Belgas. Los Holandeses. Los Portugueses, en menor medida. Esa parte de la península que invisibilizamos. Y que llevamos mal. Por no querer ver. Por no tener el sentido de comunión que Pessoa percibió. Soy Sancho, y amo el Sanchismo. Pero también de eso puedo renunciar. No tengo compromismo con el presente. Ni con el futuro.

Voy para atrás.

A recuperar lo dicho entonces.

Lo ya dicho.

Lo que dicen mis propias escrituras.

Mis propios guiones.

Mis propios textos.

Hasta traer un texto digno.

Multiversados.

Ya aquí.

Ya sacralizados.

Aceptados por el pueblo NEW.

En una votación extraordinaria.

Un partido fuera de contexto.

En otra dimensión.

En otro multiverso.

Multiversamos el pedo.

Y nos fundimos con el nuestro.

Inevitablemente subjetivo.

Y pleno.

Y ünö.

ALLS

Reversing day