Group99

La vida cambió el día en el que el grupo de 99 feedbackloopers se reunieron virtualmente en ese salón de creación social que se desplegó justo en las narices del sistema en plena pandemia.

La historia debía contener todos los elementos que hicieran triunfar el nuevo esquema sobre todos los elementos funcionales positivos de nuestro modelo actual justo antes del derrumbe de todos sus cimientos. La sociedad se fue a la verga. El sistema se puso en un trance que se entiende cuando la sociedad está a punto de virar hacia otra dirección. La bélica ya lo probamos. ¿Recuerdan?

Hay quién no. Pero estos se esfuerzan por apreciar las bondades de liderar el mundo en ese sentido bélico-industrial que tanta estabilidad nos da a los países que tenemos la cultura de las constumbres anglosajonas de una supuesta autoridad social más eficiente para la subsistencia de nuestra especie bajo el dogma de los mercados capitalistas. La antítesis de un comunismo que nunca nos preocupamos de entender. Hasta que China decidió actuar en un plano hasta donde le fue permitido, para tomar parte en el desempeño de una labor estratégica para acompañar el cambio social como una transformación global que podría asimilarse en el sentido lejano oriental que no hemos sido capaces de entender como también un proceso de aprendizaje nuestro. Las culturas entendidas desde la convivencia en los exilios compartidos.

Entrar y salir. Irse de donde uno nace. Y volver.

Los nuevos ciclos de vida.

La capacidad de expandirnos sin movernos tanto.

La disminución de nuestro modelo turístico poco cuidadoso con la sostenibilidad de nuestros ecosistemas.

Los elementos de crecimiento en las antípodas de las posiciones prevalentes.

Los análisis alternativos.

La comunidad de un nuevo cliclo.

La empresa común.

El procomún a partir de otra generacón de procomuneros.

Potenciar el know how colectivo que tenemos de nuestro devenir social tras el 15m como el reflejo de lo que aquí vivimos en las plazas. Y luego, todo el mundo, a su manera, replicó. Ese despertar. Eso fue un gesto. Un comienzo. Que nos trae otra vez hoy aquí.

Y vos aquí.

Leyéndome.

Ahogándome entre pozos y recuerdos que un día… ¿ay qué?

Como lo diría una adolescente de latinoamérica ante cualquier elemento de la lucha que nos compete para derrocar a los machos de la sociedad de las armas.

Piénsalo: ¿Qué sentido tienen las guerras?

¿Por qué la industria militar iba a deponer las armas?

Bienvenido al grupo de 99. Estás aquí para opinar. Tienes nueve horas para opinar todo lo que quieras. Después de esas nueve horas en las que podrás escribir tus opiniones para la construcción del NEW model: EWE. Se trata de base social de un movimiento de autoorganización que reside en la definición general de unos cuantos temas a tratar sobre el paso social al que estamos condenados. El sitio que estrenaremos cuando volvamos al espacio público. Ese sitio que ahora yace vacío. A esa sociedad construida sobre estos nuevos pilares. Nueve pilares. Por tumbar todos los anteriores. Como brindando a ese joven Jesús en el mercado. Por el sentido de transgresión ante las injusticias sociales de nuestros tiempos. Como entonces aquello.

Jesús supo enlazar los cuentos de Juan Bautista. Y de los otros. Los predicadores tenían un rol social importante para mantner la fe de los menos favorecidos e las circunstancias en las que esceaba la fe. Y la calidad de vida en los confines de las colonías de los Romanos. Oh, pueblo padre.

En el Escuadrón Laskar Tacaná Aconcangua la escuadra Romanos es la más antigua de todas. Por tanto, la primera en simbolismo. Pero la grandeza de una escuadra no abarca los multiversos ejemplares que se entienden desde la dual historia del resto de las escuadras: de sus civilizaciones de quién emana su nombre, y el proyecto en sí de aprendizaje de ese ser-otro que los chavales, varones, de la ciudad de México, especialmente, pero también de algún que otro lugar de provincias, esa otra periferia a la tan bien proporcionada centralidad de la República más relevante de nuestro continente reconstituido: New América.

La capital del nuevo continente es no otra que NEWDF. Este continente necesitaba un desplazamiento de poder hacia el sur. Y nuestra posición es lo suficientemente fuerte para representarnos a todos en esta capitalidad que entendemos como nuestra. En la dualidad española propia del modelo más bien autóctono del urbanismo y los modelos económicos de la Encomienda y la Hacienda, convirtiendo en México, el único gran sitio en el que sobrevive en modelo alternativo que revela el poder de absorción de la sociedad destronada de su capital, la gran Tenochtitlán, de la manera en la que algunos representantes de la sociedad holandesa, alemana, austriaca, polaca,… y así de todos los paisese miembros de la Unión, con un mismo sentimiento xenofobo contra el otro extranjero que viene a nuestros países. Sea este otro de donde fuere. La antítesis del mestizaje de nuestra historia como colonos antiquísimos de estas tierras.

Otorgamos el enaltecimiento de lo local como una pulsión inescapable. Y la peculiaridad única e irrepetible de lo que en el valle y las montañas locales acontece. Nuestra coexistencia entre nuestra urbanidad y lo que queda de la naturaleza y los ríos que por aquí fluyen, todavía, tras entubar varios sitios insalubres de nuestras cuencas. Nuestra ciudad está en sus casas. Y los vecinos nos movemos cada día para hacer nuestra actividad. Y la sociedad dice ir a algún sitio. Ese sitio es el que pretendemos alterar. Manipular para construir uno nuevo. Esa elección meditada pasa por varios filtros de interacción y crecimiento. Primero por unos pocos a los que se les enseña en viaje inicial. Y se les da varios puntos de entrada a un circuito cerrado. Y vamos a parar a los primero 99 que tienen entrada a este salón de debate. Esta ágora popular. Este mecanismo de retroalimentación del discurso del nuevo orden WEW.

New Barcino es su capital. Desde aquí, mi barrio transformador, NEWCAR, nos vamos de peregrinación a la montaña. Aquí ya contamos con la madre de Dios. La familia entera esta dispuesta a tomar ahora sí la última cena. Mañana volveremos a la sociedad transformada. A ese lugar que nos hemos podido imaginar. Como piezas de nueve ensayos paralelos. Sitios a los que tenemos la oportunidad de entrar. Y reir.

La falcultad del ser.

Algo más.

Otra cosa.

Y también lo que ya eres.

No te agobies.

Si te agobia esto vete.

Puedes llegarle a la verga, si quieres. Aquí.

O venir a la gloria… ALLS.

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